El final de la fiebre y el tiempo después

¿Cuándo termina una enfermedad febril?

¿Cuándo vuelve a estar sano un niño?

¿Cuándo puede volver a la comunidad?

Se considera que un niño está sano cuando todos los síntomas han remitido y ha salido de la fase de recuperación. En el caso de las infecciones febriles simples, esto suele significar uno o dos días sin fiebre. 

Durante la recuperación, los niños siguen fatigados, pálidos, propensos a sudar y quisquillosos. Por la mañana se les puede dar líquido caliente de limón y miel, té suave de salvia durante el día, té de tilo, té de flor de saúco o té de manzanilla por la noche. Es importante llevar ropa de abrigo, para que el niño no se enfríe demasiado pronto. Las actividades deben reintroducirse gradualmente.

Normalmente, el final de la fase de recuperación puede reconocerse por el hecho de que el niño vuelve a estar enérgico, activo, con las mejillas sonrosadas, recupera el apetito, es juguetón y "tiene ganas de marcha".

En situaciones como ésta suele ser necesario un día más de reposo en casa, y luego el niño puede volver a la comunidad (volver a salir al público). Un niño que esté tomando medicación (por ejemplo, antibióticos) no debe volver a la comunidad. Un niño que está lo suficientemente enfermo como para necesitar antibióticos, también necesita estar en casa, descansando. Un niño que ya no tiene fiebre ya no es contagioso. Sin embargo, en la guardería un niño puede contagiarse de otros en pocos días. Esto es normal en la guardería, el jardín de infancia, la escuela primaria o en los casos en que un niño tiene varios hermanos.

Desde este punto de vista, la guardería puede considerarse un "gimnasio inmunológico". Los niños van practicando poco a poco para que, cuando lleguen a primaria, la vida pueda continuar con menos fiebres y menos ausencias.

La guardería es, por supuesto, un terreno un poco más difícil, porque los niños son aún más pequeños, más sensibles y se recuperan más lentamente (y a veces con más complicaciones).

Después de una enfermedad febril bien soportada, los niños a veces desarrollan nuevas cualidades o nuevas habilidades. Por ejemplo, pueden volverse más habladores, menos miedosos, tener mejor sueño o apetito y parecer que se les da mejor algo que antes. Esto es señal de que la enfermedad que padecieron les hizo más robustos. En otras palabras, el niño salió de una crisis ganando algo con ella.

¿Cómo prevenir nuevas infecciones febriles?

Permitiendo una exposición natural y sin fisuras a las infecciones comunes. Es una experiencia común que después de algunas enfermedades febriles (incluso altas), hay un descanso más largo; las enfermedades son menos frecuentes, más cortas y menos graves.

Busque atención médica para la fiebre recurrente si

• en el plazo de tres semanas la fiebre vuelve a superar los 38,5 grados en un intervalo de 2-3 días,
• si el niño ha viajado a un país lejano en el último año,
• si ha tenido infecciones febriles más de 10-12 veces al año y posiblemente con complicaciones.

Un niño pequeño que se desplaza por la comunidad, visita una piscina o procede de una familia numerosa puede tener hasta 8-10 enfermedades febriles en un año medio.

Aquí encontrará las referencias numeradas correspondientes: Referencias

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